El proyecto de nuevo código penal que el gobierno de Honduras ha promovido y que entrará en vigor el próximo 25 de junio, supone una clara amenaza a derechos humanos básicos, entre los que se incluyen el derecho a la protesta y a la protección de las mujeres ante crímenes de violencia machista.
Desde UGT, por iniciativa de la Confederacion Sindical Internacional (CSI), la Confederacion Sindical de las Américas (CSA) y sindicatos hondureños, hemos hecho llegar a las autoridades hondureñas y a la embajada de Honduras en España, una carta de repudio de la pretendida reforma, alertando del grave peligro que la misma supone para la democracia y los derechos civiles en el país centroamericano.
Organizaciones sindicales hondureñas, como CGT, CTH y CUTH, continúan denunciando el grave atentado contra la libertad sindical que suponen algunas disposiciones (contenidas en los artículos 553, 554, 573, 574, 587, 588 y 589) que criminalizan y judicializan la protesta social, específicamente los derechos de asociación, reunión y manifestación.
Por otra parte, este nuevo código penal también implica un evidente retroceso en la protección de los derechos de las mujeres hondureñas, estableciendo una drástica disminución de las penas contra los delitos de índole sexual y violencia contra la mujer en general. En Honduras se produjeron 390 asesinatos por violencia machista en 2019 y el 95% de los casos se mantiene impune.
Desde UGT enviamos reiteramos nuestro apoyo a la lucha de los sindicatos y del conjunto de la sociedad hondureña ante la entrada en vigor de este nuevo código penal que debilita de manera clara el marco de protección de los derechos humanos en el país.