Los datos de la EPA del primer trimestre del año revelan una vez más las perniciosas consecuencias que sobre las personas , sobre el empleo y sobre la economía está provocando la reforma laboral.
3.354.200 personas se encuentran en desempleo; aumenta el paro; la protección por desempleo no alcanza a todas las personas que se encuentran en situación de paro y los recursos de las políticas de empleo no son suficientes para dar solución a los más afectados y afectadas, como jóvenes, mujeres, parados de larga duración, mayores de 55 años.
La Encuesta de Población Activa demuestra que el ritmo anual de creación de empleo es del 3,16%, mientras en el trimestre se produce un descenso del 0,48%, dato estacional propio del primer trimestre del año.
En el cómputo del año, el empleo creado es tanto indefinido como temporal (aumenta un 3,9% el primero y un 2,68% el segundo). La tasa de temporalidad se sitúa en el 25,9% de los asalariados, en un nivel dos décimas inferior al primer trimestre de 2018. Y la parcialidad involuntaria persiste y llega al 52%, con 1,5 millones de personas que trabajan a tiempo parcial por no haber encontrado empleo a jornada completa. Para UGT esto demuestra la debilidad del proceso de expansión económica en el que nos encontramos en nuestro país, ya que el empleo que se crea es de baja calidad.
Con una cifra total de 3.354.200 personas en desempleo (49.900 más que el trimestre anterior, aunque 441.900 menos que un año atrás), la tasa de paro se sitúa en un 14,7% (0,25 puntos superior a la registrada el pasado trimestre, y 2,05 p.p. por debajo de hace un año). La tasa femenina de desempleo alcanza al 16,74% y se mantienen elevadas las cifras del paro de larga duración y muy larga duración (un 45,2% de los desempleados lleva más de un año buscando empleo y el 31,4% más de dos años).
Persiste un volumen importante del número de hogares con todos sus miembros en paro (1.089.400), con un aumento en el trimestre de 35.900 hogares y una tasa de cobertura que deja fuera del sistema de protección a casi el 40% de las personas registradas como desempleadas.
UGT exige la derogación de la reforma laboral, junto a medidas adicionales para luchar contra la precariedad y la desigualdad en nuestro mercado de trabajo. Es imprescindible que el nuevo gobierno, que se forme a partir de las elecciones generales del próximo 28 de abril, apueste por los factores que permitan crecer de forma sostenible y oriente las políticas económicas, sociales y de empleo hacia la reducción de las desigualdades y la pobreza, logrando empleos de calidad con salarios dignos.