El Organismo prevé que la economía española crecerá el 2,4% en 2019, el 1,9% en 2020 y el 1,7% en 2021. Estos datos afean las declaraciones de su Gobernador y resaltan la necesidad de que las empresas apliquen la subida del SMI para este año y los 1.000 euros de salario mínimo por convenio para 2020 firmados en el IV AENC.
El Banco de España tiene que dejar de dar lecciones sobre materias que no le competen y ejercer sus funciones, la de controlar a los bancos, con más aptitud.
El Banco de España ha publicado hoy la actualización de sus proyecciones macroeconómicas, donde mantiene que la economía española crecerá el 2,4% en 2019, el 1,9% en 2020 y el 1,7% en 2021. Además, la institución apunta a una prolongación del actual periodo expansivo en el corto y medio plazo.
Para UGT esto no es sino una muestra más de la necesidad de subir los salarios y de acabar de una vez con las necedades provenientes de algunos sectores, incluidas las del propio Gobernador, que critican la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta los 900 euros este año.
Si la economía crece, los salarios también deben aumentar. Más aún cuando ya se ha demostrado que este aumento de los salarios no está impactando negativamente en el empleo. Ha sido el propio director general de Economía y Estadística del BdE el que ha reconocido hoy la incertidumbre sobre sus propios datos y conclusiones; por tanto, si es demasiado pronto para tener datos rigurosos el BdE debería haberse abstenido de cualquier pronunciamiento y evitar distorsiones económicas y en la negociación colectiva. Además, el problema es que, en este caso como en otros muchos posicionamientos de la institución, hay sesgos de parcialidad.
Subir salarios es una medida de justicia social y altamente positiva que está ayudando a que se genere más empleo en nuestro país y a que aumente el consumo de las familias. Las empresas deben implementar la subida del SMI para este año e ir en la dirección marcada por el IV Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) para 2020, que son los 1.000 euros de salario mínimo por convenio.
No hacerlo sería de necios. Y negar esta subida de los sueldos con mentiras y falsedades supone un acto de soberbia, de imprudencia y de partidismo manifiesto, además de generar una alarma social infundada.
Para UGT, los informes del Banco de España contradicen las declaraciones de su gobernador. No se puede afirmar que la economía española va a seguir creciendo tres años más (más los cinco anteriores) y, seguidamente, que no es conveniente subir los salarios. La riqueza que se genera en este país se debe repartir de manera equitativa entre los trabajadores y trabajadoras, no dejarla en manos de unos pocos. Y esto hay que decirlo, igual que se dijo durante la crisis que era necesaria una moderación salarial.
Que dejen de dar lecciones y ejerzan competentemente sus funciones
Una institución como el Banco de España no puede crear alarma social en relación a un tema tan importante como es la subida del SMI solo porque sus dirigentes tengan una ideología determinada que va en contra de los intereses de la mayoría de los ciudadanos y ciudadanas. Para el sindicato, deberían reconocer que sus informes son de parte, que se parecen más a las fundaciones de los partidos conservadores que, en realidad, a una institución pública que pagamos todos y todas.
En este sentido, UGT resalta que lo que debería hacer el Banco de España es controlar a los bancos, que es su función principal, en lugar de dar lecciones sobre economía, empleo o pensiones. La falta de acción en su competencia principal ha sido la que nos ha llevado a la mayor crisis financiera de nuestra historia.
Para el sindicato, no es de recibo que la institución se dedique a dar lecciones sobre materias que no le competen utilizando dinero público, más aún cuando esto va en contra de los intereses de la mayoría de ciudadanos y ciudadanas de este país. Lo que va a mejorar la competitividad, la productividad y el Estado de Bienestar de este país va a ser el reparto de la riqueza de manera equitativa. Es esto lo que se debe alentar y no medidas partidistas que benefician a unos pocos, los mismos de siempre.